Normas de comportamiento a bordo
Muchos de los que llegan por primera vez a un velero se quedan asombrados por el confort que pueden proporcionar los yates de nueva construcción, pero es un error considerarlo un hotel flotante. ¡Todo lo contrario!
Todos tenemos que cambiar nuestro comportamiento cotidiano y adaptarlo a lo que llamamos la vida en el mar.
Se considera educado y atento que solo una persona (normalmente el patrón, el que posee la licencia de patrón) acuda a la oficina para hacer el papeleo. Las oficinas de alquiler de embarcaciones de los puertos deportivos no suelen ser lo bastante espaciosas para albergar a toda la tripulación, mientras que la mayor parte del papeleo lo realiza una persona responsable, ya sea la que posee la licencia o la que ha pagado el viaje. En la mayoría de los casos, se trata de la misma persona. Los demás miembros de la tripulación suelen dirigirse al primer bar para tomar un refrigerio o al supermercado más cercano para abastecerse.
Una vez realizado el papeleo, lo más práctico es que la misma persona haga el check-in técnico con el personal de alquiler (también llamado patrón o marinero) a bordo de un yate alquilado. Cuando el check-in técnico está finalizado, el resto de la tripulación puede embarcar, cargar el equipaje y acomodarse. Este es un buen momento para que el patrón explique a los demás lo que se debe y no se debe hacer. Básicamente, se trata de la seguridad a bordo y de algunos trucos y consejos, a fin de que la estancia en el yate sea más cómoda y divertida.
Todos los miembros de la tripulación deben saber dónde encontrar y cómo utilizar los chalecos salvavidas. Muchas personas llevan consigo sus propios chalecos salvavidas, por lo que las normas de protección contra los incendios pueden explicarse primeramente. Toda la tripulación debe saber dónde están colocados los extintores y cómo utilizarlos. Conviene explicar el funcionamiento de la instalación de gas, así como las posiciones de las válvulas de gas de seguridad y de la cocina y el horno.
Los inodoros para barcos son específicos no solo por su (pequeño) tamaño, sino también por su sistema de descarga. La mayoría de ellos utilizan las bombas manuales que introducen el agua en el inodoro y bombean las heces, una vez hechas las necesidades naturales. Tómese muy en serio la descarga del inodoro y hágalo con cuidado y a conciencia. Si su velero no está equipado con un depósito de residuos, procure no utilizar el inodoro mientras haya alguien nadando alrededor del barco o cuando esté amarrado en el puerto deportivo. Tampoco debe descargarlo si no se encuentra en el mar abierto. El único material permitido en los inodoros de los barcos son los alimentos atascar el inodoro y causarle un problema muy desagradable. Los inodoros eléctricos no pueden descargar el papel higiénico, así que hay que tener aún más cuidado al utilizarlos.
¡En general, intenta siempre evitar cualquier daño (del barco o del inventario) y/o lesión!
Tenga en cuenta que una embarcación puede tambalearse mucho en un momento, por lo que es importante que al menos una de sus manos sujete algo sólido para mantener el equilibrio y evitar lesiones. Hay aparejos y líneas de vida en la cubierta y barandillas en el interior de la embarcación. Guarde el equipaje y especialmente los utensilios de cocina de forma que no se caigan cuando el barco se balancee. También, es importante sujetar la taza o el vaso con la mano cuando se bebe a bordo. Aunque el barco está anclado con seguridad en la bahía en calma, solo dos olas traídas por el barco al pasar pueden bastar para romper la copa de vino dejada en el borde de la mesa.
Otras normas del comportamiento en embarcaciones y puertos deportivos
Se considera de mala educación fondear demasiado cerca de otras embarcaciones. Mantenga una distancia de seguridad e intente no molestar a sus vecinos. Ellos quieren disfrutar de la tranquilidad tanto como usted, así que procure no hacer demasiado ruido. La misma regla se aplica a las pernoctaciones en los puertos deportivos. Para prolongar su estancia en el mar sin atracadas innecesarias en los puertos o las marinas, es importante gastar el agua de forma responsable y eficiente. Reduzca el número de duchas e intente gastar la menor cantidad de agua posible al hacerlo. Lo mismo se aplica para fregar los platos y el mismo principio debe seguirse sobre la energía eléctrica. Si no está enchufada a la corriente, toda la instalación eléctrica del barco depende de sus baterías. Estas se recargan al poner en marcha el motor, así que sea delicado con el consumo eléctrico.
Palabras finales
Por último, pero no menos importante, intenta pensar un paso por delante. Eso significa que, haga lo que haga o decida hacer, debe ser consciente de las consecuencias de sus acciones: desde tirar de las cuerdas y abrir los bloqueadores, hasta planificar la ruta. Hay que insistir en que comprobar la previsión meteorológica varias veces al día es crucial para una navegación agradable y segura. Aunque esté de vacaciones, debe estar concentrado en lo que hace - así es la vida en el mar.